En España, datos del IDAE indican que entre el 25% y el 30% de nuestras necesidades de calefacción son debidas a las pérdidas de calor que se originan en las ventanas.
La colaboración de los vecinos de dos viviendas en Manoteras ha sido esencial en dos proyectos de investigación desarrollados por el Grupo de Investigación GISCHE del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja (CSIC). Con el proyecto REFAVIV “Rehabilitación energética de la fachada de viviendas sociales” [1] se han efectuado mediciones de consumo durante dos años en una vivienda social. A continuación, con el proyecto REVen “Rehabilitación energética de viviendas sociales, aplicando productos innovadores de ventana” [2], se han sustituido las ventanas y se va a proceder a cuantificar el ahorro obtenido además de otros aspectos relacionados con la calidad ambiental interior y la satisfacción del usuario.
Ambos proyectos están dirigidos a evaluar el impacto de la rehabilitación energética de la vivienda social. La rehabilitación energética se puede ver como una gran oportunidad que va a dar solución a diversa problemática, sin embargo, pese a que la Unión Europea realiza múltiples esfuerzos en esta dirección, la realidad es que aún no se ha producido la rehabilitación energética de un número significativo de edificios.
El objetivo general del Proyecto REVen es definir las propuestas de mejora de ventana más adecuadas en rehabilitación de vivienda social considerando aspectos técnicos y socioeconómicos. Esto se está realizando a través de distintos objetivos específicos desarrollados principalmente mediante simulaciones e investigación experimental.
En estos proyectos se plantea que el propietario es el elemento clave para que tan deseada rehabilitación energética sea una realidad. Las motivaciones que llevan a un usuario final a decidirse a llevar a cabo una actuación no son simples y no están únicamente relacionadas con el retorno económico de la inversión.
El propietario es el que va a decidir si lleva a cabo la rehabilitación y éste aún no siente esa necesidad que a nivel macroeconómico es tan evidente y que tantos aspectos positivos aportaría si llegara a producirse.
En la actualidad, el vecino de Manoteras que participa en el estudio está satisfecho con el cambio de ventana, ya que aprecia grandes mejoras en cuanto a confort térmico, lumínico y acústico; tras un año de mediciones podremos obtener resultados de ahorro y contrastarlos con los obtenidos mediante simulaciones.
Además, se está construyendo un módulo laboratorio para comparar diferentes sistemas de ventanas mediante un plan de monitorización.
Se trata, por tanto, de un proyecto de ciencia ciudadana donde la investigación científica se lleva a cabo por una suma de colaboradores: científicos y profesionales junto a gente común, la participación de todos los agentes involucrados da lugar a resultados de mayor relevancia y de aplicación real y ágil.
En este proyecto se han involucrado también múltiples empresas, en este sentido en un ejemplo de que la investigación es más efectiva si intervienen administración pública, empresa privada y ciudadanos.
En concreto en la investigación experimental llevada a cabo en la vivienda de Manoteras participan dos empresas como patrocinadores del proyecto:
La empresa Carpintek suministra e instala ventanas mixtas de madera aluminio.
Las ventanas de madera añaden ventajas con respecto a las de PVC o aluminio puesto que gracias a sus estudiados perfiles permiten conseguir niveles de aislamiento térmico muy elevados con menor espesor.
La empresa Saint-Gobain suministra el acristalamiento, se selecciona un vidrio doble acristalamiento de altas prestaciones con gas argón e incoloro proporcionando gran aporte de luz natural.
El producto específico es SGG CLIMALIT PLUS PLANITHERM XN F2 4(16 argón)4.