Proyecto Arquitecturas Destacadas

El Instituto Eduardo Torroja, junto con el Programa EsPatrimonio Descúbrelo, emprende este nuevo proyecto con la intención de dar mayor difusión a nuestra Arquitectura y a los Arquitectos e Ingenieros que la han hecho posible.
Nace con vocación de continuidad y muestra regularmente, a través de pequeños vídeos que se difundirán por las redes sociales y nuestras Webs, elementos representativos de nuestra arquitectura y/o ingeniería, así como diferentes aspectos relacionados con los mismos: autores, trabajos de restauración, intervenciones para la adecuación a las necesidades del siglo XXI, técnicas constructivas, etc. Son pequeñas pinceladas que nos irán adentrando en esta disciplina que se ha convertido en referente a lo largo de la historia.

El Hipódromo de la Zarzuela, de los Arquitectos Arniches y Domíguez y del Ingeniero Eduardo Torroja, con su innovadora sección es uno de los elementos más representativos del Movimiento Moderno en España. Su destacada y respetuosa restauración ha sido llevada a cabo por el Estudio de Arquitectura Junquera Arquitectos.

Obra del Arquitecto Jaime de Ferrater Ramoneda de 1958 que rompe con los cánones de la arquitectura industrial española hasta ese momento. Destaca la estructura de la nave principal de arcos parabólicos de los que cuelgan las grandes vigas del forjado principal. Restaurado entre 1998 y 2001 por el Arquitecto Carlos Ferrater con un escrupuloso respeto al inmueble y, especialmente, al funcionamiento estructural del edificio.

El Gimnasio del Colegio Maravillas, obra del Arquitecto Alejandro de la Sota, ejecutado mediante una arquitectura sobria, despojada de todo lo superfluo, dejando vistos tanto los materiales como la estructura y desfigurando los límites con la arquitectura industrial.
Una arquitectura “esencial” que responde a un programa de necesidades y cuyo resultado es uno de los mejores ejemplos de la Arquitectura Moderna Española.

La Central Térmica de la Ciudad Universitaria de Madrid, fue construida en el año 1932 por el Arquitecto Manuel Sánchez Arcas y por el Ingeniero Eduardo Torroja. Un sistema innovador de calefacción centralizada basada en modelos norteamericanos. Se diseñó bajo los criterios de economía, eficiencia energética y facilidad de mantenimiento. El Maestro Torroja es el encargado de su restauración tras la Guerra Civil y, aunque ha sufrido algunas transformaciones, aún conserva gran parte de su maquinaria original, encontrándose actualmente en funcionamiento como un auténtico Museo Vivo.

EL FRONTÓN RECOLETOS

El Frontón Recoletos (1935) es obra del Arquitecto Secundino Zuazo y el Ingeniero Eduardo Torroja. Su forma responde a las necesidades funcionales y estéticas del espacio deportivo. La continuidad de curvas de los graderíos en relación con la doble forma laminar de la cubierta, dotan al edificio de una gran expresividad plástica. Durante la Guerra Civil Española la cubierta sufrió importantes daños que provocaron su desplome en 1939. Con ello desaparece uno de los elementos más vanguardistas e innovadores a nivel internacional en el campo de las estructuras laminares.

Dentro de la obra del Maestro De La Sota traemos el Colegio Mayor César Carlos (1967) que supone una innovación en esta tipología al plantear una separación en dos edificios, uno para la vida individual y el estudio, y otro para la interacción social. Este es el resultado de una profunda reflexión sobre el programa de funcionamiento de un centro destinado a estudiantes de postgrado, donde se les ofrece escapar momentáneamente de la tensión del estudio, mediante el tránsito por el jardín, hasta el lugar de relación. El Arquitecto José Manuel López-Peláez, Premio Nacional de Arquitectura y Catedrático Emérito de la UPM, nos introduce en las claves de la obra.

La creación de una Ciudad Universitaria moderna, que aglutine facultades, campos de deporte y residencias de estudiantes, en espacios abiertos, establece la necesidad de desarrollar un sistema de transporte que la recorra y la comunique con la urbe.  Para ello se modifica el trazado de la línea que daba servicio a la Escuela Central de Agricultura, única preexistente en el ámbito, , lo que conlleva la ejecución de tres singulares obras del Maestro Torroja: la estación subterránea del tranvía, frente a Estadio que nunca llegaría a construirse, el Viaducto del Aire, llamado así por su ligereza, situado en un bello enclave natural, y la Estación de las Damas, junto a la fuente del mismo nombre y que confluye con la Senda Real que lleva a la Finca Real de El Pardo.

El Colegio Mayor Argentino «Nuestra Señora de Luján», una joya poco conocida de nuestro Patrimonio del s. XX. Realizado por los grandes exponentes del Movimiento Moderno Argentino, Arquitectos Horacio Baliero y Carmen Córdova, con la colaboración del Arquitecto Español Javier Feduchi Benlliure en la Dirección de Obra. Se configura como un edificio escalonado, de apertura en abanico e integrado en la naturaleza, con ciertas reminiscencias del organicismo arquitectónico de Aalto.

El Colegio Mayor Santo Tomás de Aquino, obra que les reportará a los Arquitectos José María García de Paredes y Rafael de la Hoz Arderius el premio Nacional de Arquitectura en 1957. Proyecto promovido por la Orden Dominicana donde la conceptualización de un complejo programa de necesidades, la depuración del lenguaje arquitectónico y la fusión de las artes, desembocará en este innovador resultado.

La Casa do Brasil de la Ciudad Universitaria de Madrid (1959-1962), fue proyectada por el Arquitecto brasileño Luis Alfonso d’Escragnolle Filho que fue acompañado durante su ejecución por el Arquitecto español Fernando Moreno Barberá. El edificio, influenciado por la arquitectura de Le Corbusier y de Oscar Niemeyer y Lucio Costa en Brasilia, responde a los postulados más vanguardistas del momento.

La nueva Facultad de Filosofía y Letras inauguraría el ambicioso proyecto de la Ciudad Universitaria de Madrid. Con ella da comienzo un nuevo capítulo de la educación en España mediante el que se pretende crear una Universidad autónoma, desligada de la política, donde se imparta una formación integral que aúne los modelos cientificistas y humanistas. Para lograrlo confluyen los esfuerzos de dos destacadas personalidades: el Arquitecto Director de la Junta Constructora de la Ciudad Universitaria, D. Modesto López Otero, y el nombrado Decano de la Facultad, D. Manuel García Morente. Binomio al que se suma el brillante arquitecto Agustín Aguirre, redactor del proyecto, cuyo trabajo, junto con el ingeniero Eduardo Torroja y en estrecha colaboración con García Morente, dará como resultado la integración de pensamiento y forma.

El Instituto Técnico de la Construcción y del Cemento, desde su creación, se erige como uno de nuestros más destacados embajadores. El Instituto se convierte en promotor y baluarte de la modernidad e innovación en el sector de la construcción, y en punto de encuentro y foro de debate internacional en lo referente a la investigación científica y su implementación.

El Proyecto para el Centro de Estudios Hidrográficos y Laboratorio de Hidráulica se lleva a cabo entre 1960 y 1963 por el Maestro Miguel Fisac. Destaca la Nave de Modelos donde en su innovadora cubierta se fusionará materia, forma y necesidades técnicas, dando como resultado una cubierta adintelada de 22 metros de luz conformada por las llamadas “vigas-hueso”, de una indudable belleza plástica.

La Fábrica Clesa
Con la publicación del Decreto de 18 de abril de 1952 sobre creación de centrales lecheras en municipios de más de 25000 habitantes y del Reglamento por el que se regulan, se establecen las bases para la construcción de una moderna e innovadora fábrica que la Sociedad Clesa encargará en 1968 al Arquitecto Alejandro de la Sota. La Central se proyecta como escaparate de modernidad, se dispone una pasarela desde donde ver el proceso de producción sin interferir en su funcionamiento, que atraviesa una secuencia de luminosos espacios interconectados que confieren al inmueble una excepcional riqueza espacial.

El Centro de Restauraciones Artísticas “La Corona de Espinas”

En 1961, la Dirección General de Bellas Artes crea el Instituto de Conservación y Restauración de Obras de Arte, desde donde se propone la conformación de un avanzado Centro de Restauraciones. La obra será llevada a cabo por los Arquitectos Fernando Higueras y Antonio Miró y dará como resultado un edificio circular, de configuración escultórica de los elementos constructivos y de marcada expresividad estructural. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 2001.

El Teologado de San Pedro Mártir para los Padres Dominicos
La Iglesia se integra en un conjunto jerarquizado de patios y claustros que conforman el Convento y Teologado. La planta responde a sus estudios sobre la disposición de los fieles en las iglesias previas al Concilio Vaticano II adaptada a un programa específico: como iglesia conventual y como iglesia pública. La solución elegida de dos arcos hiperbólicos, tensionan el espacio convergiendo hacia el altar. En el interior del templo, Fisac aboga por la simplificación de la expresividad iconográfica, utilizará pocas obras y de calidad, basando la expresividad plástica en el movimiento hacia el altar, mediante la disposición muraria, la luz y el color.

Los trabajos de la Ciudad Universitaria de Madrid se llevaron a cabo desde un pequeño pabellón, primeramente situado en donde hoy se encuentra el Hospital Clínico y posteriormente trasladado a su ubicación actual en la zona de La Moncloa. Manteniendo la dirección del Arquitecto López Otero se buscó dar continuidad a un proyecto que sobrevivió a diferentes regímenes políticos cuyas huellas aún imprimen el conjunto. La Guerra Civil ocasionó importantes daños, algunos de los cuales supusieron pérdidas irreparables, como los murales de uno de los mayores exponentes de la pintura al fresco de la época, Luis Quintanilla, que revestían el vestíbulo principal. A finales de los años 50, el Pabellón de la Junta acoge los servicios administrativos centrales pasando a convertirse en Pabellón de Gobierno.